Trabajo hace más de 12 años en gestión de personas, y solo hace unos pocos años escucho el concepto de inclusión y hace uno y medio decidí estudiar por experiencias personales accesibilidad universal y diseño para todas las personas.
Fue en ese momento que comprendí que la radical diferencia está en la concientización de que la accesibilidad es para todas las personas; para la mujer embarazada, para la persona de tercera edad, para la persona con discapacidad sensorial, para la persona con discapacidad cognitiva, para la persona con discapacidad física, para ti y para mí, para cada persona.
¿Cuán diferente sería la inclusión en Chile, si edificáramos con accesibilidad para todas las personas, que educáramos, para todas las personas, que nos movilizáramos en transporte público pensando en todas las personas, que el urbanismo y las vías de nuestras ciudades y sectores rurales se diseñaran pensando en todas las personas?
Porque esa persona que contratas no solo debe hacer ese trabajo que le encomiendas, debe lograr llegar a su lugar de trabajo, tomar transporte público, transitar como peatón, la mayoría de las veces por rutas poco amigables accesiblemente, debe ir al baño en el trabajo, poder servirse una taza de café, alimentarse, usar los diferentes espacios del lugar de trabajo, relacionarse con los diversos equipos y estamentos de la organización, usar las herramientas de trabajo requeridas, medios de comunicación interna, entre otros, que muchas veces requerirán adaptaciones o ajustes razonables y disfrutar de su trabajo como cada integrante de la organización.
Si todas las personas fuésemos educadas en ecosistemas inclusivos reales y accesibles desde la infancia, seríamos profesionales capaces de ejercer nuestras profesiones desde esa mirada y la accesibilidad se daría por sí misma al igual que la inclusión. Por eso creo que la invitación es no solo a mirar la cuota de cumplimiento corporativa de inclusión laboral, sino la educación y formación que estamos dando a los futuros profesionales de Chile, que es lo que realmente generará cambios.
Y entonces… ¿Cómo estamos por casa? En tu empresa, ¿hay inclusión de verdad?
Antonella Vespa Mayol
Fundadora de Panoramas Accesibles
Psicóloga Laboral, Asesora Senior en Gestión de Personas